11 noviembre 2007

Rafael Alberti

Alberti, Rafael (1902-1999) Poeta y dramaturgo español, nacido en El Puerto de Santa María(Cádiz). Inicialmente se dedicó a la pintura. Se trasladó a Madrid con sufamilia, y en 1924 se le concedió el Premio Nacional de Literatura por el primer libro que publicó, Marinero en tierra. Se trata de una obra de un refinado popularismo donde universaliza el mar, que llega a convertirse en un mito. En1926, apareció La amante, relato poético de un viaje en automóvil, al que sigue, alaño siguiente, un nuevo libro de poemas, El alba del alhelí. Las tre sobras se inscriben dentro de la tradición de los poetas anónimos del romanceroy Garcilaso de la Vega, aunque con una sensibilidad de poetavanguardista. En 1929, tuvo lugar un cambio importante en su poesía, cuando publicó Cal y canto, influido por Luis de Góngora y el ultraísmo. También de esemismo año es Sobre los ángeles. Considerada su obra maestra, es una alegoríasurrealista en la que los ángeles representan fuerzas dentro del mundo real. Productode una intensa crisis personal relacionada con lo que el propio poetacalifica de "amor imposible" y los "celos más rabiosos", contiene imágenes que suponen altas cumbres poéticas. Sus tonos apocalípticos se prolongaron en Sermones y moradas (1930).Su surrealismo le lleva a introducir asuntos personales en el ámbitode las cuestiones históricas, lo que supuso en él una inclinación hacia elanarquismo, como demuestra su elegía Con los zapatos puestos tengo que morir, de1930. Posteriormente se afilió al Partido Comunista español, y publicó,hasta 1937, un conjunto de libros que el autor denominó El poeta en la calle,aparecidos conjuntamente en 1938. También de la misma época son sus obras deteatro, entre las que destaca Fermín Galán (1931). Posteriormente, y dentro dela misma línea de carácter surrealista y político, escribió obrasteatrales y entre las más conocidas se encuentran El adefesio, de1944, y, de 1956, Noche de guerra en el Museo del Prado. Una nota quehay que destacar en este escritor andaluz es su afición taurina, quele ha llevado a realizar carteles taurinos, escribir muchos ydestacados poemas sobre el tema, e incluso salir a los ruedos en lacuadrilla de Ignacio Sánchez Mejías.Desde el exilio Con su compañera, la también escritora María Teresa León, se vioobligado a exiliarse después de la derrota de la República en la Guerra Civilespañola. Vivió en Argentina hasta 1962. A partir de ese año residióen Roma, y no regresó a España hasta 1977; fue elegido diputado por laprovincia de Cádiz. El poeta recoge su vida durante los años de destierro en La arboleda perdida (1959 y 1987). Entre la poesía no política de Alberti, posterior a 1939, destacanEntre el clavel y la espada, de 1941, y A la pintura, de 1948, unbrillante intento de describir un arte en términos de otro. EnRetornos de lo vivo lejano, de 1952, y Baladas y canciones del Paraná,libro de poemas publicado el año siguiente, incluye canciones muycercanas a las de Marinero en tierra que ofrecen un universonostálgico del que no está ausente la ironía. Algo que vuelve aocurrir en el primer libro que publicó a su regreso a Europa, Roma,peligro de caminantes, de 1968. Al lado de estos poemarios, están los poemas más estrictamente políticos inspirados por las circunstancias, como las muy conocidas Coplas de Juan Panadero, de 1949, y La primavera de los pueblos, de 1961. Entre la producción de Alberti posterior a su regreso a España, cabe destacar el libro decarácter erótico Canciones para Altair, publicado en 1989. Ha recibido muchospremios y reconocimientos, entre ellos el Premio Lenin de la Paz, en 1966, y elPremio Cervantes, en 1983. El 28 de octubre de 1999 falleció Rafael Alberti, el último exponente de la generación del 27 y figura clave de la poesía española de todos los tiempos. Un paro cardiorrespiratorio fue la causa de su muerte, cuando seencontraba en su casa del Puerto de Santa María, en Cádiz, en la misma ciudad que le vio nacer hace 96 años. Por expreso deseo del poeta, sus restos mortales fueron incinerados ysus cenizas serán devueltas a las aguas de la Bahía de Cádiz, a la que tanestrechamente vinculadas han estado su vida y su obra. En el Puerto deSanta María, localidad de la que era además alcalde honorario, se declararontres días de luto y se le rindió un homenaje popular.

Enciclopedia Microsoft Encarta 99


Sueño del marinero


Yo, marinero, en la ribera mía

posadasobre un cano y un dulce río

que da su brazo a un mar de Andalucía,

sueño ser almirante de navío,

para partir el lomo de los mares

al sol ardiente y a la luna fría.


¡Oh los yelos del sur!¡Oh las polares

islas del norte! ¡Blanca primavera,

desnuda y yerta sobre los glaciares,

cuerpo de roca y alma de vidriera!

¡Oh estío tropical, rojo, abrasado,

bajo el plumero azul de la palmera!


Mi sueño, por el mar condecorado,

va sobre su bajel, firme, seguro,

de una verde sirena enamorado,

concha del agua allá en su seno oscuro.


¡Arrójame a las ondas, marinero:

-Sirenita del mar, yo te conjuro!

Sal de tu gruta, que adorarte quiero,

sal de tu gruta, virgen sembradora,

a sembrarme en el pecho tu lucero.


Ya está flotando el cuerpo de la aurora

en la bandeja azul del océano

y la cara del cielo se colora

de carmín. deja el vidrio de tu mano

disuelto en la alba urna de mi frente,

alga de nácar, cantadora en vano

bajo el vergel azul de la corriente.


¡Gélidos desposorios submarinos,

con el ángel barquero del relente

y la luna del agua por padrinos

!El mar, la tierra, el aire, mi sirena,

surcaré atado a las cabellos finos

y verdes de tu álgida melena.


Mis gallardetes blancos enarbola,

¡Oh marinero!, ante la aurora llena



¡y ruede por el mar tu caracola!

1 comentario:

maría magdalena gabetta dijo...

¡qué belleza! Magda