31 julio 2009

Poema de Camilo de Ory



Bio-bibliografía




Camilo de Ory nació en Segovia y en 1970, aunque vive en Málaga. Es licenciado en Psicología por la Universidad de esta segunda ciudad, si bien, por una cuestión de ética y responsabilidad civil, nunca ha ejercido.Ha publicado los libros Cosas con la lengua (Arguval, 2002) y Lugares comunes (Pre-Textos, 2006, Premio Internacional de Poesía Emilio Prados).En la actualidad es columnista del diario La Opinión de Málaga, y mantiene un blog en Internet.La pasión por la literatura no le he hecho renunciar a su verdadera vocación: la de perceptor de becas y subsidios.


ASÍ EXISTE ESTE AFECTO


Igual que el agua quema

si hierve,

como el descanso agota

y el no comer acaba con el hambre

y una cerveza quita la resaca;


como termina el viaje

al alcanzar el punto de destino;


como da sed el vino,


como es posible hablar sin decir nada;

como crecen las uñas de los muertos,

existen los afectos.


(Inédito en libro)
Foto de Alicia Calero Cervera

30 julio 2009

Reconocimiento a Marcos Ana





Hay una Campaña para solicitar para Marcos Ana el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia. Podéis entrar en la página y firmar de manera personal. Azuldemar quiere sumarse a dicha petición.


http://www.unpremioparamarcosana.org/


Chill Out - Café del Mar Vol.7

Waclaw Wantuch Erotic Photos,


Exaltación del amor fisico en el arte

peter and gordon crying in the rain.wmv

Alicia Calero Cervera






Más allá de lo que puedes ver




Poema de Pedro Javier Martín Pedrós, del libro " Poesía en la distancia "


Viajo por los raíles de este día
con el corazón lleno de
nostalgias,
a veces con sobrepeso.

Silencios en los rostros de mis
compañeros de viaje por Roma.

La religiosa mueve con armonía rítmica
su rosario austero de madera, con olor
a sándalo.

Espero que su generosidad no tenga
fronteras y me llegue alguna
fragancia de sus oraciones.

Recuerdo, con caricias visuales,
a la joven con esclerosis múltiple por
su mar de sonrisas.

No muy lejos de aquí, lloran,
en los cimientos de su fe,
cristianos en el vaticano.

Florencia

29 julio 2009

Cristina Peri Rossi




Poema Babel Desnuda



Babel, desnuda, acaba de nacer.

Babel, desnuda, es como un niño ciego,

no tiene ojos

y mira, horrorizada,

con los ojos del tacto

que descubren superficies

que no siempre es amable tocar.


Babel, desnuda,

palpa, toca, roza, empuja, oprime:

sus manos son las palabras

de un mudo

que en el terror del silencio

sabe que hay un secreto.


Foto de Kurrucucu


28 julio 2009

Bruce Springsteen en concierto hoy en Sevilla

¡¡ QUE LO DISFRUTEIS !!








Poema de Luis Felipe Comendador



HARRY LIME
A veces los amigos de la infancia
se quedan detenidos en un gesto
en una soledad
en la memoria
y no hay forma de verlos sino anclados
en una foto sepia antigua rota.
Se niegan a entender lo que sucede
suelen hablar de «historia» con minúsculas
relatan como abuelos las batallas
y te invitan a un vino alguna tarde
Su mal es algo endémico
no grave
Tú aún eres el mejor y no has cambiado
Ellos son la desgracia
tú el pecado
mortal Original
y no han sabido
crecer hasta tu altura.
Si un día te ven llorar
creerán que ríes.


Foto de hashpe

Poema de Antonio Manuel Fernández Morala



HOMENAJE A LOS DEFENSORES DE LA DEMOCRACIA EN 1936
MORALES DE TORO
Plaza de las Escuelas, Barrio "El Castillo"
Sábado, 8 de agosto de 2009
12 horas
Eleuterio Martínez Gamazo
Luis Matilla Saz
VitalianoLópez Lorenzo
Ángel Gutiérrez Vecino
Marciano Gutiérrez Motrel
Florián Gutiérrez Micharel
Ismael González Gamazo
Lázaro García Barbero
Nicomedes Sandoval González
Cecilio Petite Villar
Rogelio García Martín
Maximino Sánchez López
Jerónimo Sánchez Sánchez
Tarsicio Sandoval Sandoval
Joaquín Salgado Matías
Belisario García Barbero
Antonio Villar Rubio
Bernardo Domínguez Rubio
Isaías Carrasco Matilla
Agustín Domínguez Gil
Francisco de la Torre García
Gervasio Domínguez Gamazo
Evaristo Barbero Carmona
Fabián Andrés Bragado
Pablo Calleja Corbella
Mariano de la Cruz Medina
Jesús Calleja Corbella
Manuel Andrés Llanos
Filemón Alonso Domínguez
Juan Manuel Casasola Fernández
El señor Mendigo
Programa de Actos:
1.- Saludo y Presentación.
2.- Lectura de textos glosando a las víctimas y/o los valores democráticos que defendieron.
3.- Entrega de diplomas honoríficos a los familiares.
4.- Dedicación de la Plaza en memoria y honor a las víctimas.
Minuto de silencio. •
5.- Agradecimiento y cierre del Homenaje.
6.- Comida de Confraternización en un Restaurante cercano.
Organizan familiares y amigos de represaliados del franquismo en Morales de Toro
Colabora Ayuntamiento de Morales de Toro
CON VUESTRA MEMORIA
Algunas noches no existo y sueño con las sendas y caminos, con los árboles
y la tierra que os acompaña.
Cada pensamiento es la imagen de un niño huido; despavorido se enfrenta a
muros sin sombras; sin zapatos recorre el hambre y el olvido.
El miedo y la mentira lloran entre fríos carcelarios.
Los ojos de la vida nos miran con tristeza, pero no se cierran.
Os posáis sobre el tiempo con la belleza de la libertad en sentido profundo.
Nuestras manos yéndose hacia la tierra y hundiéndose en ella,
para que nazcan más humanas y solidarias.
En la noche y por el cielo, estrellas con vuestro nombre grabado a fuego y luz,
reparten la dignidad que habéis creado.
Vuestros sueños se regalan a los otros sin nada a cambio.
Los silencios llenan nuestros pechos con vuestro recuerdo.
Entonces me ocurre no reconocer como seres humanos a vuestros asesinos.
¡Cuánto duelen algunos hombres…, cuánto!
Os levantáis todos los días de la vida en nuestra memoria;
y la memoria es libertad, y la libertad sois vosotros y vosotras,
vuestra lucha para crear un mundo más justo.
Desde esta casa de silencio abrimos la ventana al mundo para que se ventile.
Aquí están nuestros labios para nombraros y que la libertad los reparta.
Algunas noches no existimos, y la tierra llora, la tierra…; con vuestra memoria.

Poema de José Martí


Cuando me puse a pensar
La razón me dio a elegir
Entre ser quien soy, o ir
El ser ajeno a emprestar,
Mas me dije: si el copiar
Fuera ley, no nacería
Hombre alguno, pues haría
Lo que antes de él se ha hecho:
Y dije, llamando al pecho,
¡Sé quien eres, alma mía!?

Pablo Mora


INSOMNIO

NOSOTRAS Y NOSOTROS, poetas de un siglo moribundo, náufragos de apabullantes hormigueros de concreto. Hijos de Bolívar y del Che. Del sol, del viento y de las lluvias. Hermanos de Violeta, Alí, Víctor, John Lennon y sus guitarras vivas. Camaradas de la rosa, de Aquiles, de Argimiro. A poco de ver nacer el siglo que evocará nuestros nacimientos y barbaridades, al terminar de pintarle de rouge
los labios a la luna.

Poema de Ana Segura Maqueda


Seducción

En una tarde que me siento hermosa,
seduzco al pensamiento y lo hago mío.
Hacemos el amor en un lecho de rosas
salpicado con gotas de rocío.

Vivimos un idilio más bien corto,
pues una tarde de tormenta y frío
se acerca sigiloso por el cielo
-en una nube negra-
el desvarío.

Furtivamente, con engaños y tretas,
le hace la corte al pensamiento mío,
y éste, siendo en esencia volátil y voluble,
va en pos de su infidelidad
como un reto, una gesta, un desafío.

Engalanados ambos y contentos
marchan hacia un destino sin rumbo.
Siento frío…
En un rincón perdido de mi mente
hay un hueco que ha quedado vacío.

Mi corazón, que no sabe estar sólo,
busca la razón perdida
en la sinrazón del abandono herido.

Allá en la lejanía
oigo cuchicheos de los nuevos amantes.
traman aliarse con mi corazón
y abandonarme sin calor, sin vida, sin emoción…

Mas mi corazón,
que sabe más que yo de amores,
se abre a mi desazón y a mi extravío.

Me sumerge en un mar de sensaciones cálidas,
me aproxima a su éxtasis, que es mío.
Y los dos,
ya unidos para siempre,
sentimos, en cada palpitar,
un dulce escalofrío.


Foto de JAVIERGARCIAFOTO

27 julio 2009

Bruce Springsteen Live in Barcelona - Empty Sky

Poema de Alicia Calero Cervera



Tic Tac

Voces, sonrisas,
sol nocturno
brilla en la oscuridad.
Vacío que quedó
fuera, en mi interior.
El silencio
me aturde
con su aullido.
Tan solo el tic tac
del reloj sin cuerda
que dejaste al marcharte
despierta mis sentidos.
A veces no sé saber
si te has ido
o sigues aquí.
A veces no sé saber
si volverás
o te perderás.
Tu camino es mi camino
pero el mío
no es de nadie.

Poema de Ernesto Cardenal.


¿Has oído

gritar de noche
al oso-caballo

oo-oo-oo-oo

al coyote
solo en la noche
de luna
uuuuuuuuuuuuuú

pues eso mismo
son estos versos.




Foto de Lolapc


25 julio 2009

¡¡ NO MAS VIOLENCIA MACHISTA !!


María Magdalena Gabetta,



¡Que no te maten!
No es una causa justiciera,
ni es una guerra encubierta,
es sólo decir las cosas como son las cosas,
es sólo alertar a los que vienen.

Mira...
Ten cuidado...
hace tiempo ...
una juventud idealista
pensaba en el presente y el futuro,
decía discursos en los andenes,
juntaba niños en las plazas,
aliviaba dolores en las villas,
inventaba boletos accesibles
al tren de las utopías.
Los mataron...
¿te enteraste?
¡Los mataron!

Los torturaron....
¿lo supiste?
¡Los torturaron!

Los violaron...
¿Te lo contaron?
¡Sí! los violaron,
en cuerpos y almas
y...
los mataron.

Eran jóvenes
¿te enteraste?
Tenían sueños
¿lo adivinaste?

Tenían amores
¿lo sospechaste?
Y...
los mataron.

Ya te lo dije...
vine a avisarte...
están allí...
en todas partes...
están en sombras...
están ocultos...
te están mirando...
¡que no te atrapen!¡
que no te maten!
Foto de Enric sanjuame

Cuento de Jesús Zomeño





EL QUESO
(Río Somme, 30 de Junio 1916. VI Ejército francés)
Ilustración: "Le poilu fromagée"Copyright © Miracoloso


Le había llegado un queso enorme. Envío de su hermana, que consolaba con el regalo la memoria de la muerte de su esposo en Verdún. Un paquete sobrio y sin afecciones, con una doble capa de papel oscuro y un trenzado de cuerda de pita conteniendo el embalaje, ni siquiera hilo de algodón. Dentro sólo había un queso, redondo y rotundo con un peso de dos kilos al menos. No mediaban palabras Un queso beaufort de un color amarillo intenso, de corteza lavada y suave como el culo prieto de una mujer, firme y con un fuerte y penetrante aroma a mantequilla que le abría en dos las narices como para meter en medio un par de buenos cortes.
El problema fue que el queso le llegó la víspera de la ofensiva.
No podía comerlo ni, mucho menos, dejarlo atrás.
En aquella trinchera los muertos compartían el espacio con los vivos. Le repugnaba desperdiciar en esas condiciones siquiera un trozo para probarlo. La anunciada ruptura del frente enemigo sería la solución. Sólo había que esperar al día siguiente. Después del ataque merecería la pena sentarse y partir el queso por la mitad para comerlo hasta hartarse.
Veía al queso encima del mundo, dos planetas opuestos, y como único punto de contacto y de apoyo él mismo. Después imaginaba dejarlo caer encima de la boca por su propio peso e ir dándole bocados sin prisa ni miedo de que tuviese un final.
Sería perfecto el momento, pero no tenía espacio en la mochila para llevarse el queso. Maldijo el modelo de mochila francesa, rígida y pequeña, tipo maletín. El equipo de los ingleses incluía una mochila de lona que hubiera permitido meterlo dentro, pero con la suya era imposible. Cabía partirlo en trozos para que cupiera. Siete u ocho cortes de cuchillo. Sin embargo, perdería aroma y se resecaría. Además sería tanto como renunciar al goce de mantener el queso con ambas manos e ir mordiendo hasta meter en medio la cabeza, según venía a imaginarlo ahora. Definitivamente la mochila no le servía.
Calculó entonces el tamaño de la bolsa con la máscara de gas y pensó que cabría en ella, al menos si la vaciaba antes. Se dio la vuelta para que no le viesen e hizo la prueba. Entraba perfectamente.
La máscara de gas podría llevarla puesta pero sería un estorbo para correr. Mejor no ponérsela. Sin embargo tampoco podía permitir que la viesen fuera de su sitio, no era reglamentario y además le registrarían la bolsa. Bueno, quedaba esconder la máscara de gas dentro de la escudilla sujeta encima de la mochila. Era posible que con la carrera le cayese al suelo pero tendría tiempo después de conseguir otra.
Asunto resuelto.
Decidió dormir un par de horas, pero tuvo miedo de que alguien aprovechase para quitarle el queso. Si lo cobijaba dentro del regazo no pasaría nada.
Pudiera haber aplastado el queso al quedarse dormido, por eso tuvo la precaución de echarse de lado y pegarse a la pared. Pensaba en todo
Las pulgas. Se consoló considerando que las pulgas no comían queso y se quedó dormido.
Si además dormía abrazado al queso, las ratas no se lo comerían. Al menos sin que él se diera cuenta. Las ratas son asquerosas, no respetan ni a los vivos. En todo caso tendría que dormir atento.
Hormigas. Las hormigas suben con facilidad por las paredes y hay tantas que pueden cubrir y ocultar a un caballo cuando duerme. Se preguntó si las hormigas comían queso, pero se dijo que no, que las hormigas no comen queso. Pero no estaba muy seguro. Si lo sujetaba con las manos y se sacaba los guantes, llegado el caso podría sentirlas correr por sus dedos y despertarse a tiempo. Hacía mucho frío, pero la comodidad no era lo principal. De todas formas, quizá bastara con sacarse sólo un guante. Mejor el de la mano derecha porque ésta es más sensible...
Tenía un sueño inquieto.
Le despertó el sargento que andaba dando puntapiés a los que dormían. Eran casi las 07,30. Había una actividad frenética en la trinchera. Estaba a punto de amanecer. Los cañones habían cesado. Durante cinco días habían concentrado miles de piezas de artillería para barrer las posiciones alemanas, ahora ya estaba todo hecho y sólo faltaba el asalto de la infantería. En un momento así, de pronto, cuesta acostumbrarse al silencio. Muchos estaban rezando y otros orinaban o hacían de vientre en el suelo de la trinchera porque las letrinas estaban completas. A estos nadie les reprochó n
ada porque hubiese parecido derrotista considerar que después del avance pudieran tener que volverse a este lugar. Al fondo, el capitán esperaba con el reloj en la mano.
Unos rezaban, otros comprobaban su equipo, estaba prohibido fumar, un chico había perdido el correaje con las cartucheras, “¡no hay piedad!” gritaba alguien, otros comían algo de sus bolsillos, muchos orinaban, las letrinas estaban ocupadas, “vamos, vamos” decía el sargento mientras el capitán estaba al fondo como si esperase que todos callaran de pronto y entonces poder hablar él, pero había un murmullo y un trasiego continuo, el capitán miraba ya el reloj...
Entre tanto, el soldado había escondido el queso en la bolsa de la máscara de gas, pero ésta no le había cabido dentro de la escudilla y la tiró al suelo, empujándola con el pie para esconderla debajo de los tablones del entarimado. Miro al cielo, no había brisa de aire y por eso era imposible que lanzasen un ataque de gas. Estaba preparado para el asalto.
En ese momento, feliz de haber resuelto el transporte, le vino a la cabeza que por el peso pudiera romperse la correa de la saca. Repaso en su mente las costuras y rechazó la idea, en cualquier caso le dio la vuelta para pasarla delante, para sentir el bulto a la altura del regazo y así darse cuenta si lo perdía.
La pieza parecía pesar más por la mañana. Bueno, quizá fuesen sus ganas de comenzar a comer. Dentro del envoltorio de papel y enlazado de nuevo con la cuerda, parecía protegido. Sopesó la bolsa y temió que alguien se diera cuenta del bulto. Metió una camisa para confundir la silueta del paquete. Más peso, pero no importaba. La camisa estaba limpia, quizá se manchase de la grasa, aunque eso no importaba. Lo único importante era el queso.
Quizá bastase media hora, o aún menos, para que todo hubiese acabado. Alguno parecía mirarle con disimulo y eso le provocaba sospecha. Era sencillo que aprovecharan la confusión para dispararle por la espalda y quitárselo. Se marchó al fondo, a la otra parte de la trinchera, donde nadie le conocía. Allí no tenía amigos ni conocidos. Mejor así, allí nadie le había visto recibir ningún paquete el día anterior. Aquellas caras extrañas protegían el queso, porque lo ignoraban todo. Alguno de los que tenían grande la nariz podría tener también buen olfato, pero para ponérselo más difícil cobijó la bolsa dentro del capote. Era de las pocas veces que le resultaba grato que la trinchera oliese a mierda, así también quedaba camuflado el queso. Asunto resuelto.
Un soldado bajito, que aparentaba estar rezando, se acercaba mucho. Sería casualidad pero eso a él no le gustaba. Metió la mano dentro del bolsillo del abrigo y a través del forro sujetó el paquete con el queso. Estaba tenso, puede que sus nervios confundieran al otro y éste creyera que era miedo lo suyo y por eso se le acercara, para rezar juntos. Era evidente que todos aquellos eran unos idiotas que no merecían probar el queso. Se echó hacia atrás para evitar el contacto, pero entonces el sargento le empujó hacia delante. Bueno, lo cierto es que nadie parecía desocupado como para olfatear el queso. Al menos para olfatearlo y después ponerse a buscarlo. Tenía ganas de que diesen la orden de salir, porque cada vez parecía más peligroso aquel paquete con el queso. Nadie había comido queso desde hacía mucho tiempo y el propio capitán sería capaz de anular la orden si se enteraba de lo de este queso. Ha visto matar por mucho menos y este paquete cada vez parecía más grande y más pesado.
Quizá alguien se diera cuenta que estaba hundiéndose en el barro más deprisa que los demás por cargar con más kilos, pero no era probable que hubiese alguien tan perspicaz como para calcular su envergadura y deducir que ocultaba un sobrepeso. Por si acaso, se desplazó un poco a la derecha para subirse encima de un bote caído del revés en el suelo. Era una lata pequeña y vacía que parecía hundirle más porque se arrugó al ser aplastada. Maldijo la ocurrencia, pero se reconfortó pensando en el queso. Al fin y al cabo nadie se había dado cuenta. Decidió que lo comería primero deprisa y después despacio, una vez hubiera saciado la ansiedad se comería el resto muy despacio.
Al momento se dio la orden y fueron saltando fuera de la trinchera.
Hirieron al soldado antes de que llegase a su propia alambrada. Al menos el haber caído tan cerca permitió que los sanitarios lo evacuaran y pudiera morir camino del hospital.
El camillero no comprendió el significado de sus últimas palabras:—... Gracias Dios mío por el queso, porque al menos en la víspera me hizo pensar en otra cosa....

24 julio 2009

Abrazos de náufrago


Desde la ventana de nuestro blog, queremos compartir con todos nuestros amigos este tercer libro“ Abrazos de Náufrago “ de la colección “Poesía en la distancia “, así iremos abriendo, poco a poco, las páginas del mismo.




Aurelio González Ovies* José Luís Caramés Lage


Este dulzor que desprenden
las zarzas -es julio, mediodía-
me punza amargamente.

Al caer la tarde en espinas
que pinchan al coger las moras
para mancharme de tinta china
entre colores burdeos y caobas
que pintan al óleo mi tristeza.

Este dulzor, esta amargura,
-es un verano más, con su luz ciega-
no son más que mí ahora,
no son más que mi yo, no son más
que mi vida.

De responder a mis dolores
meto miedo a la vida
que me otorga lo que tengo
ya que no hay más
que mis afectos.

Poema de Ana Estepa Román



Bio-bibliografía




Nací en Córdoba en 1971, aunque resido en Berriozar Navarra desde 1987.Aquí colaboro y escribo en la revista “Tú Mujer” de la concejalía de la mujer.También colaboré con la periodista peruana Cecilia Thelme en su programa de radio “Sal y pimienta”.He tenido publicaciones en las antologías:-“Experimento poético (50 poetas)” 2005-“Sentimientos enfrentados” 2006-“Constantes vitales I” (edición anual del Ateneo Navarro) 2006-“Constantes vitales II”, 2007Y 23 de Abril el ayuntamiento de Berriozar, me editó mi primer poemario “Exilio en las Algas”.



Un Hombre…y yo

Un hombre me susurra
desde el reloj de arena
que reflejan sus ojos.

Y yo,
como burbuja de jabón, liviana,
me adhiero a sus costuras
para entregarme entera,
a la hipnótica palma de su mano.

Un hombre de raíz
que conoce mi piel como a su pueblo
ha dicho que me ama.
Y yo,
me fundo en el calor de sus inmediaciones
para morir con él,
en el frágil temblor de los desequilibrios.

Un hombre sin disfraz,
quiere viajar conmigo
hasta el final más denso
del revés de mis mundos.

Y yo,
sólo quiero quedarme en sus pupilas.

(De: “Constantes vitales II”)

23 julio 2009

Poema de Jose Gorostiza



Elegía

A veces me dan ganas de llorar,
pero las suple el mar.

Poema de Ángel González



Esperanza,

araña negra del atardecer.

Tu paras

no lejos de mi cuerpo

abandonado, andas

en torno a mí,

tejiendo, rápida,

inconsistentes hilos invisibles,

te acercas, obstinada,

y me acaricias casi con tu sombra

pesada

y leve a un tiempo.

Agazapada

bajo las piedras y las horas,

esperaste, paciente, la llegada

de esta tarde

en la que nada

es ya posible...


Mi corazón:

tu nido.

Muerde en él, esperanza.
Foto de Susanne-K.

22 julio 2009

Poema de Jose Manuel Caballero Bonald,



ENTRA LA NOCHE COMO UN TRUENO...


Entra la noche como un trueno

por los rompientes de la vida,

recorre salas de hospitales,

habitaciones de prostíbulos,

templos, alcobas, celdas, chozas,

y en los rincones de la boca

entra también la noche.


Entra la noche como un bulto

de mar vacío y de caverna,

se va esparciendo por los bordes

del alcohol y del insomnio,

lame las manos del enfermo

y el corazón de los cautivos,

y en la blancura de las páginas

entra también la noche.


Entra la noche como un vértigo

por la ciudad desprevenida,

rasga las sábanas más tristes,

repta detrás de los cobardes,

ciega la cal y los cuchillos

y en el fragor de las palabras

entra también la noche.


Entra la noche como un grito

por el silencio de los muros,

propaga espantos y vigilias,

late en lo hondo de las piedras,

abre los últimos boquetes

entre los cuerpos que se aman,

y en el papel emborronado

entra también la noche.

21 julio 2009

Poema de Begoña Leonardo










TODOS LOS HOMBRES QUE PRONUNCIARON MI NOMBRE


Los hombres que me amaron


medían el tiempo con una regla de latón


medían el amor con una brizna de hierba


medían el calor con la luz del mediodía


y me contaban cuentos


cuando la luna besaba los labios al sol.


Los hombres que me amaron



no eran los mejores amantes expertos en kamasutra


no eran los más inteligentes


eruditos en lenguas muertas


no eran los más guapos


los más fuertes


los más adinerados


ni unos pobres de solemnidad.


Tampoco eran príncipes encantados,


pero eran elocuentes oradores


en la lengua del silencio


de los espacios entre suspiros,


eran matemáticos del ritmo cogidos a mis caderas


y músicos virtuosos manejando mi instrumento.


Los hombres que me amaron estaban de acuerdo


me decían similares piropos


me miraban y reían casi igual


mentían y mordían


y me prestaban su camisa casi igual.


Los hombres que me amaron


dormidos susurraban que era bonita...


Todos los hombres que pronunciaron mi nombre


supieron, que habían amado a una mujer.





De “No frenes la lengua de los pájaros”, publicado en “Dad al aire mi voz”.

Foto de Jorge Semilla

La pobreza está servida

La pobreza está servida

Esther Arroyo


Insostenible. Ése es el adjetivo que mejor describe el sistema en el que vivimos. Un sistema basado en profundos desequilibrios entre los distintos continentes, países e incluso dentro de las mismas sociedades. En un momento en el que los recursos disponibles podrían abastecer a todo el planeta, la desnutrición afecta ya a cerca de 1.020 millones de personas en todo el mundo, según un informe de la FAO. La lucha contra el hambre continúa siendo la asignatura pendiente de la política internacional y requiere un cambio radical de estrategia de forma que los países subdesarrollados no dependan de las naciones donantes para disponer de uno de los derechos humanos más básicos: el acceso a alimentos.
Con este impresionante corto, uno de los triunfadores del 56º Festival Internacional de Cine de Berlín, Ferdinand Dimadura ha extraído la esencia de las desigualdades sociales a través de unas imágenes tan duras como reales. El consumismo, el poder, el derroche y la insensatez de unos, contrasta con la miseria, la necesidad y las carencias de otros. Son las dos caras de una misma moneda. La moneda de la injusticia. Y es que la brecha entre 'ricos' y 'pobres', lejos de reducirse, tiende a incrementarse. Mientras la capacidad económica de algunas familias les permite vivir con cierta comodidad, muchas de ellas, la mayoría procedentes de países empobrecidos, subsisten con apenas un euro al día.




Según la UNCTAD (Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo), la crisis económica mundial ha golpeado con más dureza a los estados más desvaforecidos y ha dejado al descubierto las deficiencias estructurales de los 49 países más pobres del planeta, demostrando su incapacidad de lograr un crecimiento y una reducción de la pobreza de carácter duradero. Dichos países, se distribuyen en cuatro regiones, de tal forma que del conjunto de los PMA (países menos adelantados), 33 naciones se encuentran en África, 10 en Asia, cinco en el Pacífico y uno en el Caribe.

Además, el calentamiento global azotará de forma más significativa a los países del Tercer Mundo, que ya están sufriendo los efectos de un clima cambiante y están viendo aumentar sus dificultades para acceder al agua, la comida y la sanidad. Ante este panorama, y ante la inminencia de la celebración del Año Europeo de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (2010), los líderes políticos reunidos en la reciente cumbre del G-8 en la ciudad italiana de L'Aquila han asumido el compromiso de destinar 20.000 millones de dólares en tres años a combatir el hambre, lo que supone 5.000 millones más de lo previsto. La intención existe. Ahora falta llevarlo a cabo.

ElConfidencial.com > Sociedad

Poema de Jose Antonio Antón Pacheco

La exhalación en la zarza.

El hálito en la zarza.

El aliento en la zarza.

Perdida y olvidada. Ni en la cumbre ni en el bosque. Ni en la torre ni en la atalaya. Escrita pero no hallada. Exiliada, encontrada.

La palabra en la zarza.


Del Libro Viaje Inesperado

20 julio 2009

Adriana Macias, ejemplo a seguir

POR EDUARDO GALEANO , Disculpen la molestia: armados contra los pobres

ricos y pobres donde estaras cariño mio


























Escrito por Eduardo Galeano
17/07/09

Si la justicia internacional de veras existe, ¿por qué nunca juzga a los poderosos? No van presos los autores de las más feroces carnicerías. ¿Será porque son ellos quienes tienen las llaves de las cárceles? ¿Por qué son intocables las cinco potencias que tienen derecho de veto en Naciones Unidas? ¿Ese derecho tiene origen divino? ¿Velan por la paz los que hacen el negocio de la guerra? ¿Es justo que la paz mundial esté a cargo de las cinco potencias que son las principales productoras de armas? Sin despreciar a los narcotraficantes, ¿no es éste también un caso de “crimen organizado”?

Pero no demandan castigo contra los amos del mundo los clamores de quienes exigen, en todas partes, la pena de muerte. Faltaba más. Los clamores claman contra los asesinos que usan navajas, no contra los que usan misiles.

Y uno se pregunta: ya que esos justicieros están tan locos de ganas de matar, ¿por qué no exigen la pena de muerte contra la injusticia social? ¿Es justo un mundo que cada minuto destina 3 millones de dólares a los gastos militares, mientras cada minuto mueren 15 niños por hambre o Los humanos somos los únicos animales especializados en el exterminio mutuo, y hemos desarrollado una tecnología de la destrucción que está aniquilando, de paso, al planeta y a todos sus habitantes. enfermedad curable? ¿Contra quién se arma, hasta los dientes, la llamada comunidad internacional? ¿Contra la pobreza o contra los pobres?

¿Por qué los fervorosos de la pena capital no exigen la pena de muerte contra los valores de la sociedad de consumo, que cotidianamente atentan contra la seguridad pública? ¿O acaso no invita al crimen el bombardeo de la publicidad que aturde a millones y millones de jóvenes desempleados, o mal pagados, repitiéndoles noche y día que ser es tener, tener un automóvil, tener zapatos de marca, tener, tener, y quien no tiene, no es?

¿Y por qué no se implanta la pena de muerte contra la muerte? El mundo está organizado al servicio de la muerte. ¿O no fabrica muerte la industria militar, que devora la mayor parte de nuestros recursos y buena parte de nuestras energías? Los amos del mundo sólo condenan la violencia cuando la ejercen otros. Y este monopolio de la violencia se traduce en un hecho inexplicable para los extraterrestres, y también insoportable para los terrestres que todavía queremos, contra toda evidencia, sobrevivir: los humanos somos los únicos animales especializados en el exterminio mutuo, y hemos desarrollado una tecnología de la destrucción que está aniquilando, de paso, al planeta y a todos sus habitantes.

Esa tecnología se alimenta del miedo. Es el miedo quien fabrica los enemigos que justifican el derroche militar y policial. Y en tren de implantar la pena de muerte, ¿qué tal si condenamos a muerte al miedo? ¿No sería sano acabar con esta dictadura universal de los asustadores profesionales? Los sembradores de pánicos nos condenan a la soledad, nos prohíben la solidaridad: sálvese quien pueda, aplastaos los unos a los otros, el prójimo es siempre un peligro que acecha, ojo, mucho cuidado, éste te robará, aquél te violará, ese cochecito de bebé esconde una bomba musulmana y si esa mujer te mira, esa vecina de aspecto inocente, es seguro que te contagia la peste porcina. Δ

Eduardo Galeano. Escritor y periodista. Centro de Colaboraciones Solidarias.

Poema de Juan Ramón Jimménez





Te dehojé, como una rosa,


para verte tu alma,


y no la vi.


Mas todo en toro


--horizontes de tierras y de mares--,


todo, hasta el infinito,


se colmó de una esencia


inmensa y viva.
Foto de Chelu

Poema de Fernando Pessoa



Esto

Dicen que pretendo o miento
En cuanto escribo. No hay tal cosa.
Simplemente
Siento imaginando.
No uso las cuerdas del corazón.

Todo cuanto sueño o pierdo,
Que pronto cae o muere en mí,
Es como una terraza que mira
Hacia otra cosa más allá.
Esa cosa me arrastra.


Y así escribo en medio
De las cosas no junto a mis pies,
Libre de mi propia confusión,
preocupado por cuanto no es.
Sentir? Dejemos al lector sentir!


(? 1933)Versión de Rafael Díaz Borbón

Poema de Beni Paredes


Mas que palabras

No hay tinta necesaria para teñir las páginas de mi alma,
Y escribir todo esto que brota
como manantial de agua dulce de mis entrañas.

En la distancia abismal de tu pasado y el mío quedaron los recuerdos,
La memoria de la bitácora de nuestras vidas entrelazadas se a perdido
en el fondo del mar.

Ya no me llama el contestador de tu voz,
resonando en las paredes de este espacio habitado,
Al fin de cuentas si hay final para la historia de nunca jamás.

Brindo por el feliz olvido,
Por las horas gastadas en el reloj del tiempo,
Por el amor y el desamor, bienvenidos ambos.




Foto de Mª Teresa Pascual

Joaquín Sabina - Contigo

19 julio 2009

Poema de LUPE GARCIA ARAYA. Copyright © Del libro " Síntesis del alma "




Tus manos son hoy como coletas de espuma
que resbalan al tocar la arena.
Miro al infinito y parecen invisibles los recuerdos,
todos los que no estáis...

Y mientras el agua traga como gran monstruo
vuestras caras desdibujadas en la distancia.
Es inmensa la línea del horizonte....
Quisiera veros cubiertos de algas,
enredarlas en vuestros pies dormidos,
como el cielo lo está hoy.

Os quiero sin saber si es real este amor
de siglos y eternidades.


Foto de Miguel Angel Rodríguez Romeo