
A veces, la vida presiona sobre las almas
derramando el flujo de su pasión
en forma de dolor y muerte.
Anidan en su ribera palabras de desconsuelo,
palabras sombrías, que amargan.

A veces, un reguero de lágrimas
baña el fértil campo de mi
debilidad,
de mi ternura,
y empapa el Universo extenso
de mi ternura,
y empapa el Universo extenso
de la compasión,
y nacen partículas nuevas,
y nacen partículas nuevas,
mágicas,
que se aparean.
que se aparean.
Foto de Alejandro Sayegh
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