
Catalina Zentner * Ana Segura Maqueda
En el espacio
que media entre susurros y silencios,
atraviesan la oscuridad
relámpagos de fuego.
Como brasas recientes
de un sol incandescente,
emergen mil imágenes
del fuego que se apaga.
Se diluyen las sombras
en mitad de una noche
de guitarras y vino,
de amantes clandestinos,
de rosas chamuscadas
en fúlgidas hogueras.
Y tú y yo nos quemamos
del fuego en la mirada,
de nuestros iris sin tiempo
como volcán sin boca,
se escapan por las grietas
y surcos que los marcan,
rubricando sin firma
la vida que no pasa.
En el espacio
que media entre susurros y silencios,
atraviesan la oscuridad
relámpagos de fuego.
Como brasas recientes
de un sol incandescente,
emergen mil imágenes
del fuego que se apaga.

Se diluyen las sombras
en mitad de una noche
de guitarras y vino,
de amantes clandestinos,
de rosas chamuscadas
en fúlgidas hogueras.
Y tú y yo nos quemamos
del fuego en la mirada,
de nuestros iris sin tiempo
como volcán sin boca,
se escapan por las grietas
y surcos que los marcan,
rubricando sin firma
la vida que no pasa.
Imágen de Adolfo Morales Cordero
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