Aguardándote
Sobre la noche
y solo estoy con tu no presencia en mis hombros,
con tanto amor a distancia
perturbado por la mar cercana,
a la guarda del consuelo ante el encuentro escrito
y tus besos en papel verjurado de dos gramos,tu tarjeta de visita castellana,
la palabra sugerida por tus cálidas manos.
Del poemario Santuario Azul
1 comentario:
Desde el santuario del tiempo
suena la aldaba y sale a abrir
tu voz.
Publicar un comentario