Si cuando
fue la rebelión de abril
me hubieran
matado con ellos
yo no te habría
conocido:
y si ahora
hubiera sido la rebelión de abril
me hubieran
matado con ellos.
Cuando los
dorados corteses florecieron
nosotros dos
estábamos enamorados.
Todavía tienen
flores los corteses
y nosotros ya
somos dos extraños.
Las pesadas
gotas parecen
pasos subiendo
la grada
y el viento
golpeando la puerta
una mujer que va
a entrar.
La persona más
próxima a mí
eres tú, a la
que sin embargo
no veo desde
hace tanto tiempo
más que en
sueños.
1 comentario:
Extraordinario, qué más se puede decir.
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