Y así
eres hasta tu extensión,luminosa y naciente en la soltura
de una brasa
inquieta.
En tu cintura germina un juramento sobre el amor de un
fruto,
memoria de un escalofrío que remueve mi adolescencia
en la
mordedura de un beso.
...
Y ahora tu deseo de claridad subirá desde las
rocas
hasta el antojo del cielo,sacudida de todas las brumas
entre el
incendio de las estrellas,
hermosa en tu dispersión lunar.
Y así se
desencadena la desnudez de los continentes
sobre tu aureola de constelación
infinita
en un reposo de somnolienta aurora.
Apareces como una claridad
indecible sobre un relámpago
de magnolias,
derramando en tu apostura
implacable una geografía
de jardines.
Sostenida en un filamento de
terciopelo frugal
desciende tu inclinación castellana ante un prolongado
firmamento fugaz,primer antojo sobre el estuario de unos labios satinados
en
una holgura abierta de liberación universal.
F.José Romero.Astronomía Del
Edén.Un fruto llamado Gloria
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