13 julio 2013

Luz María Jiménez Faro







FUERON TUS MANOS TERCAS...


Fueron tus manos tercas y
desnudas
las que me deshojaron.
Yo fui la eterna margarita
del sí y del no:
pétalo a pétalo
talada en tu cintura.
Toda ya cicatriz
abierta hacia la lluvia.


No hay comentarios: