Cuando el arcángel de la muerte
te deja indiferente,
cuando tiene malas alas
tu dolido corazón,
cuando sin aliento vas a ninguna parte
porque te pesan los caminos
y el aire carece de memoria,
cuando tu frente cree en la suerte
inútilmente,
cuando todo es sombra
e inseguros despropósitos,
cuando el viento solo conoce el arte
de la voz de metal de una espada cortante,
cuando el antiguo trino se vuelve desaliento,
cuando tienes voluntad de genealogía desobediente,
pero te da pereza hasta ir contra corriente,
cuando te vuelves rondador de nada
y señor de la desgana,
cuando las noches son dolor y vacío
tras un día sin dios y sin mañana,
cuando cansado ya de penas
la sangre suelta bridas a la muerte,
cuando sujetas el alma propia
enjaezada para tu corazón doliente,
cuando los nobles muertos
disfrutan los placeres de la muerte,
y uno se encuentra vivo, en un naufrágio
sin suerte,
mejor gastar los gajos
de esta naranja inerte.
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