CARTA ABIERTA
Dime que me calle
y yo,
que no pretendo otra cosa que tus ojos
enmudeceré dócil,olvidaré los signos de las letras,
esconderé los lápices,
dedicaré mis manos a tareas
finitas, cotidianas…
Pero dime que vuele y te recree,
que preñe la palabra
de susurros, cosquillas, sensaciones…
de promesas, de lágrimas,
y dejaré
vacía mi despensa,
solitaria mi casa,
para que quepan dentro, sonrientes,
los nombres de los hombres

No sé cómo nombrarte,
pero sé que me escuchas,
que me hablas…
(situado justo frente a estas palabras).
No hay comentarios:
Publicar un comentario