
POEMA INVERTIDO DE INVERNO
Abandonado,
esperando, quieto,
mecido a soplidos raudos,
posado en el filo de un rayo
dejó Dios trinando un pájaro verde.
Apartándose del camino soleado
Decidió éste invierno volarse.
Abandonado,
esperando, quieto,
mecido a soplidos raudos,
posado en el filo de un rayo
dejó Dios trinando un pájaro verde.
Apartándose del camino soleado
Decidió éste invierno volarse.

La nada hoy,
de nubes blancas y aisladas, colorean
desnudas las ramas de los árboles
en ese azul estático
que tiene el frío de la tarde.
Foto de Maria Calvo
1 comentario:
Javier, éste poema es también tuyo, si así lo deseas. Un abrazo.
Publicar un comentario