10 julio 2012

Begoña Abad


LA MEDIDA DE MI MADRE


No sé si te lo he dicho: mi madre es pequeña
y tiene que ponerse de puntillas
para besarme.
Hace años yo me empinaba,
supongo, para robarle un beso.
Nos hemos pasado la vida
estirándonos y agachándonos
para buscar la medida exacta
donde poder querernos.


No hay comentarios: