02 agosto 2008

FRENTE AL ESPEJO DE Virginia Gawel

FRENTE AL ESPEJO


Yo, que comí la cáscara


por no merecer la pulpa.


Yo, que le creí a la culpa


y me escondí tras su máscara.


Yo, que me abofeteé y me dije


los más obscenos insultos,


que me negué a darme indultos


condenándome a estar triste.


Yo, que suicidé a mi anhelo


para lograr ser querido.


Yo, que me enemisté conmigo,


truncando todos mis vuelos


Yo, que me escupí en la cara,


abusador de mí mismo.


Yo, que complací al cinismo,


sobornando a quien me amara.


Yo: exigente y despiadado,


con nadie como conmigo.


Yo: mi más cruento enemigo,


mi juez y mi sentenciado......


me levanté esta mañana
cansado de no quererme,


de apagarme, oscurecerme


(que mi luz no encandilara).

Vi en el espejo mis ojos


mirándome en mi mirada,


tantas veces empañada


por mirarme con enojo...


Y me di ternura... Y vi,

en ese rostro cansado


que me observaba extrañado,


lo bello de lo que fui:


me vi ante los que han sufrido

amparando el desamparo.


Me vi veraz. Me vi honrado.


Me vi noble. Me vi erguido.

Me vi alentando lo Hermoso.


Me vi reparando heridas.

Con mi sangre agradecida

me supe ingenuo y gozoso.


Me vi venciendo al Abismo


sin mancha ni cicatriz...


y quise hacerme feliz


honrando que soy yo mismo.


Que soy franco, solidario.


Que soy leal y confiable,


y que cuando envainé mi sable


aposté a lo humanitario.


Sin autocompasión malsana,


fui piadoso ante mi pena,


y levanté mi condena...


como el que, amando, se ama.


Aprecié que, pese a todo,


pese al error y al acierto,


siempre elegí estar despierto,


sin sumergirme en el lodo.


Y mirando mi mirada


me pedí perdón, llorando.


Y, de mirarme mirando,


Amé a ése a quien miraba.


Quiero empezar a regarme,


fiel labriego de mí mismo,


porque no es egocentrismo


abrir mi Esencia y mostrarme.


Vine a Ser. Y eso decido:


dispongo abrirme a la Vida.


¡Ya basta de tanta herida,


siendo heridor... y el herido!


Declaro, en el día de hoy,


no una tregua: una Amistad.


Asumo la potestad


de respetar a quien soy.


Por todo lo que no fui,


y por lo que hice posible,


así: imperfecto y querible,


decido creer en mí.










2 comentarios:

Ariel Gawel dijo...

Hola mi Nombre Es Ariel Gawel vivo en Monte Grande.
Me gustaria saber quien es Virginia Gawel

Anónimo dijo...

Estimada Ariel, te adelanto que Virginia es una psicóloga transpersonal. Si entras en Google y pones su nombre, podrés recabar más información.
Nos alegra que visites nuestro blog Azuldemar, estamos encantados de tenerte aquí.
Lupe y Javier